era en algun lugar neutral, un inmenso ambiente de cuatro paredes (inmenso... paredes alejadas) y piso de textura demasiado prolija y pareja, como 3D en las epocas de doom. y sin techo. pero tampoco cielo. simplemente una luminosidad fosforescente y tranquila que bajaba como niebla.
me acerco a una de las paredes. hay una maquina expendedora de pelotitas rebotinas, y adentro puedo ver la pelotita mas genial que haya visto. quiero tenerla, hacerla rebotar y ver si toca algo arriba, quizas un techo? no lo se. solo se que quiero tenerla, pero veo que la ranura para monedas tiene dientes, y solo tengo monedas comunes de 25. mientras veo eso y rebusco en mi bolsillo soy conciente de que, por mas de que haya muchas otras pelotitas antes que esa para bajar hasta la canaletita, por el solo hecho de quererla va a bajar esa y no otra. saco una moneda del bolsillo. tiene hendiduras justas para pasar por la ranura. doy vuelta la perilla y escucho el ruido.
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